Orar
es hablar con la parte más profunda de nuestro Ser. Meditar es escuchar su
respuesta
Dalai
Lama
Siempre hay
un primer rayo de sol aunque tímido y delicado que se vislumbra atrevido en el horizonte y nos
avisa de que la tormenta ha pasado.
Hoy tenia ante mí a un alma noble, triste quejumbrosa y abatida la veo dando zarpazos a ciegas intentaba como pez fuera del agua, aliviar su
dolor intentando absorber la
vida entre grandes bocanadas de aire. Su mente aguda e inquieta siempre, le muestra uno y mil caminos que engañosamente ve necesario andar pero
que no es más que lodo que solo le servirá para
sumergirlo más y más en su
necesidad no reconocida de ser rescatado
. Y no es aunque así se cree fervientemente los designios de la vida, los efectos irreversibles de decisiones
mal tomadas o camufladas en
respuestas hoy inertes, su peor enemigo…
La pena reconocida por mi alma me llevó a estas líneas…
Sin duda
alguna no hay enemigos cuando hay
entendimiento
Es
cuando dejamos de entender, que surge el
miedo, la desconfianza y el abismo
Nada
nos hace más esclavo que nuestro propio pensamiento sometido a la lucha continua del miedo.
Al
igual que podemos entender que el día
nace y muere para renacer, que los actos
se suceden y cambian sus ritmos a medida que nos lo
proponemos. Sencillamente podemos entender que
la vida, nuestra vida, es
inteligentemente cambiable porque así lo decidimos
Querer
es poder. Reconocer y aceptar. Marcar
prioridades que nos hagan avanzar que
nos hagan sonreír, sentir y vivir por
ellas. Luchar sin descanso para no
perdernos ni un solo amanecer, ni un
solo rayo de luz
Nada está escrito, nada se finaliza siempre que tengamos a nuestro Ser libre de ataduras mentales.
Es
nuestra paz interna la que nos da fuerzas para poder liberarnos de esa terrible cadena que nos va apagando poco a poco hasta consumirnos y no dejar
ni huella de lo que somos…
Negarnos
a vivir aquello que tememos perder es
morir por dentro y eso
es innegablemente la muerte más cruel
Errar,
aprender de ello y volver a intentarlo. No es fácil, solo hace falta ser
valiente
Sin
dejar de mirar al cielo… Namaste